martes, 31 de diciembre de 2019

OBRAJILLO Y SAN MIGUEL


Hace dos meses escribí sobre el distrito de Canta y allí mencioné que muchos años atrás Canta era un destino de distracción y paseo muy recurrente para los limeños, pero que en los últimos años algunos otros pueblos de la misma provincia de Canta habían tomado la preferencia de los turistas por la oferta de distracciones que ofrecía.


Algunos de esos pueblos que ofrece nuevas alternativas de distracción y relax es Obrajillo y San Miguel. Hoy estaré escribiendo sobre algunos datos de mis visitas a dichos lugares, las cuales dicho sea de paso han sido muchas. En esta oportunidad no estaré describiendo detalles de la ruta porque eso ya lo hice cuando escribí sobre Canta en octubre 2,019. Por lo tanto, comenzaré escribiendo desde la llegada a Obrajillo en adelante.

El pasaje de Lima a Canta es de S/ 12.00 pero los fines de semana sube a S/ 15.00. Si quieres que el auto nos lleve hasta el mismo Obrajillo tenemos que adicionar dos soles más o de lo contrario esperar otro auto o combi que nos lleve hasta dicho lugar. El tiempo aproximado de desde Canta a Obrajillo es 5 minutos.

También antes de llegar a Canta hacia la izquierda hay un camino afirmado que conduce directamente a Obrajillo sin necesidad de entrar a Canta.  Pero lo más divertido es hacer la ruta Canta-Obrajillo caminando y disfrutando del paisaje serrano.

Años atrás Obrajillo era un pueblo tranquilo y con pocos habitantes situación que a la fecha ha cambiado mucho. Hoy en el pueblo se ve gran cantidad de turistas junto a gente local que ofrece muchos servicios de aventura y relax a los turistas, muchos restaurantes y hospedajes. El desarrollo del turismo trae ingresos y prosperidad para los lugareños pero también algo importante es que no pierda su identidad.

Todas las veces que he llegado a la plaza principal siempre ha estado solitaria, ni una sola persona en ella. Es como si no viviera nadie, pero no es así, toda la gente que llega se va directamente al puente, lugar desde donde nace la diversión.


La plaza principal es pequeña, el perímetro lo conforman la iglesia principal y viejas casonas. Dentro de ella no hay árboles ni flores, solo crece algunas hierbas y un pasto verde que combinado con el color azul del lindo cielo crea un ambiente de ensueño.

Obrajillo es un distrito pequeño que forma parte de la provincia de Canta. Tiene pocos habitantes y la mayoría de ellos se dedica al cultivo y crianza de truchas. En los últimos, con el auge del turismo los más jóvenes se están dedicando a esta actividad como guías turísticos y ofreciendo excursiones de trekking o paseos a caballo por los alrededores del pueblo.

En la calle principal que forma parte del perímetro de la plaza principal se encuentra la iglesia San Juan Bautista de Obrajillo. Según los datos que se conocen se cree que la iglesia se comenzó a construir en el año 1,818 y su construcción duró aproximadamente cinco años.

Para acceder a ella hay que subir por una gran escalera a lo largo del todo el atrio. Tiene una gran puerta de medio arco de entrada con un techo a dos aguas. A los costados tiene dos altas torres que sirven de campanarios y dentro de ellas se encuentran grandes campanas que datan de 1,872.

En la parte central alta se ve un vitral de San Juan cuando era niño. La Virgen Purísima y San Juan Bautista son venerados con mucha devoción en el pueblo y sus celebraciones centrales son en el mes de junio.

Al lado izquierdo de la iglesia, muy cerca a la base de la torre se encuentra los restos de una vieja maquinaria que se usaba para extraer agua.


 
Más adelante casi al borde de la vereda encontramos un pozo de agua construido a base de lajas de piedra.

En la parte central de la plaza se encuentra una pileta de bronce que data de la época colonial.


Desde la iglesia se tiene una vista de toda la plaza principal. Se aprecia los jardines, la pileta central y las viejas casonas junto a nuevas construcciones que forman todo el perímetro de la plaza.



 
También desde aquí a los lejos se observa en la parte del cerro de enfrente la caída de agua de la Catarata de Shupucro.



 
Cuando llego a un pueblo no voy directamente al lugar turístico principal, siempre comienzo llegando a la plaza principal y busco la manera de entrar a su iglesia. A veces es difícil entrar a las iglesias, especialmente cuando el pueblo es pequeño porque siempre la puerta está cerrada y solo se abre al público los días en que se celebra misa. Incluso en algunos pueblos pequeños no hay ni cura.



Muchas veces el cura de un pueblo más grande toma un domingo y va de pueblo en pueblo celebrando misas, de tal manera que en cada pueblo la hora de misa es diferente. Se puede intentar preguntar por la persona que tiene las llaves de la puerta de la iglesia y con un poco de suerte convencerlo de que nos deje entrar. Al final siempre debemos dejar un donativo.



Pero a lo que siempre le dedico un tiempo considerable es a recorrer sus calles, acción que me permite ver a los pobladores caminando, ver sus casas, ver como visten o cualquier cosa que llame mi atención. Todo ello me permite conocer un poco más del lugar y de seguro encontrar algunos detalles únicos y especiales que no lo mencionará ningún guía turístico. Son cosas o detalles que solo tus ojos y tu corazón los descubrirán, siempre y cuando estés preparado con todo tu ser emocionado y dispuesto a descubrir cosas nuevas. De lo contrario no verás nada extraordinario.



Viejas portadas y puertas de madera se resisten a desaparecer y van sobreviviendo al tiempo. Por ejemplo, esta portada en una casona contigua a la iglesia principal es toda de madera tallada con muchas molduras, difícilmente ahora se confeccionan puertas de este tipo.  Urge que las autoridades locales hagan algo por restaurar estas casonas, testigos de la historia de esplendor del pueblo.


Igualmente reparar mantener y proteger las casonas con largos balcones de madera, mucha de ellas con relieves únicos que se encuentran en casi todas las calles cercanas a la plaza principal.



También podemos apreciar casas con balcones más pequeños, pero no por ello menos bellos. Imaginemos caminar por estas calles con todas las casas reparadas, con paredes limpias y pintadas y con puertas y balcones reparados, algunas podrían convertirse en hospedajes, museos o restaurantes. Creo que sería realmente gratificante y de seguro las calles estarían llenas de gente.



Las callecitas y casonas antiguas, cada una con sus características y particularidades propias es lo que realmente le pertenece al distrito de Obrajillo. Los atractivos naturales por los cuales los turistas van a este lugar realmente no están dentro de la jurisdicción de Obrajillo sino del anexo de San Miguel.  Así que, a recuperar, a preservar y cuidar lo que es propio, que el tiempo y el desinterés no acaben con las cosas bonitas.



El distrito de Canta fue un importante centro de abastos para las minas de Cerro de Pasco. Posiblemente en Obrajillo vivían los grandes comerciantes, quizás sea esta la explicación del por qué a pesar de ser un pueblo pequeño se pueda ver grandes casonas de hasta dos pisos con balcones de madera tallada.


Ahora una casa de dos o mas pisos no tiene nada de extraordinario, pero seguramente 100 ó 200 años atrás, construir una casa de adobes de dos pisos era toda una hazaña y un símbolo de estatus y riqueza.


Caminando por las calles encontré una vieja reliquia automotriz. Un viejo auto Mercedes Benz que pasa probablemente sus últimos días en una de las calles de Obrajillo. Construido en la lejana Alemania, cruzó mares y hoy descansa en un lejano pueblo de la sierra peruana, particularmente limeña. Esta marca siempre estaba asociada al lujo, la clase, al estatus social alto; un auto elegante más apropiado para la gente mayor que para los jóvenes.


Una rara construcción da paso a que una amplia calle se divida en dos más angostas.



Seguimos caminando y llego al local comunal de la Comunidad Campesina de Obrajillo.



En la calle Chillón se ubica el Colegio de Educación Inicial  N° 506-7. La entrada principal nos da la bienvenida con una colorida pintura mural en su pared frontal. Por dentro todo se ve limpio y ordenado. Aquí solo se enseña jardín.


 

En la pared contigua podemos ver más pinturas murales que hacen referencia a la limpieza y al cuidado de la naturaleza y el medio ambiente. Algunos mensajes dicen:  "No es limpio el que limpia, sino el que no ensucia",  "Si no ayuda a limpiar, no ayude a ensuciar".



En la misma calle llegamos a las instalaciones de la escuela 20274  Un colegio en donde se brinda educación primaria a mujeres y varones.




El colegio es pequeño con pocos salones  de clases de acuerdo a la población de educandos. En el interior se observa un gran campo deportivo donde los niños y jóvenes puede realizar al aire libre ejercicios físicos y practicar deportes. Me pregunto si rodeados de estos bellos paisajes se aprende más rápido.



 

La infraestructura hotelera se ha desarrollando rápidamente con el auge del turismo. Podemos encontrar buenos hoteles con todas las comodidades para pernoctar no solo uno sino varias días. La mayoría de ellos se encuentran en los extremos del pueblo.


Después de recorrer las calles de Obrajillo avanzo por la calle que me llevará directamente al puente sobre el rio Chillón.  A lo largo de este camino de unas tres cuadras aproximadamente se encuentran muchas tiendas y puestos de ventas de artesanías, dulces, ropas y todo tipo de accesorios para los paseos, gorros, lentes para el sol, es como una feria.


Muy cerca al puente se encuentran los grandes restaurantes de la zona. Todos han sido construidos con material rústico, situación que le da un ambiente campestre al lugar.

Hay muchos, cada una con una oferta diferente al gusto del paladar y también de acuerdo al bolsillo del cliente.


Los platos que tienen mayor demanda son el chancho al palo, al cilindro, a la caja china, la pachamanca, la trucha en sus presentaciones de frita, a la parrilla o en ceviche. También en la carta de los restaurantes encontramos otros platos comunes como el lomo saltado, el arroz con pato, pollo frito, papa a la huancaína, choclo con queso, entre otros.


Algunos restaurantes tienen zona para aparcamiento de vehículos. Este detalle es importante porque la zona cercana al puente es una parte muy angosta y es en donde se concentran todos los turistas. Los fines de semana y fechas festivas es realmente complicado encontrar un lugar donde estacionar un carro. Tener en cuenta si se hace el viaje con carro propio.



Llegamos al puente donde comienza la oferta de servicios de paseos y otras actividades que el turista puede realizar. Hasta el puente llega los límites del distrito de Obrajillo y cruzando se encuentra los límites del anexo de San Miguel el cual pertenece al distrito de San Buenaventura.



Entonces podemos decir que todos los atractivos turísticos de esta zona se encuentran realmente en el anexo de San Miguel, pero los turistas más lo relacionan con el distrito de Obrajillo.  El motivo es porque pocos turistas llega a la plaza de San Miguel que se encuentra en la cima de una colina y por lo tanto creen que están en Obrajillo.



Una actividad sin costo alguno es aquella que consiste, dependiendo del gusto de cada persona, en hacer una corta o larga caminata al borde del rio Chillón, escuchando el murmullo de las aguas del rio bajo la sombra de grandes árboles de eucaliptos sobre los cuales diversos pajarillos trinan sin cesar, es como música celestial para los oídos.



Un paseo imperdible es el paseo a la Cataratas de Lucle, el cual se hace por un camino que se inicia al lado derecho del puente. La caminata dura aproximadamente 15 minutos y la cascada se encuentra al lado izquierdo. Si no queremos caminar también podemos hacer el recorrido montado en caballo.



En realidad, no es una formación natural, es una cascada artificial formada para alimentar la Central Hidroeléctrica de Canta. Se encuentra dentro de en un terreno privado motivo por el cual al entrar debemos realizar un pago de S/.2.00. También muy cerca de ella se localiza una extensa zona para acampar en donde muchos turistas instalan carpas muy cerca del rio. En las noches se prenden fogatas y siempre se puede escuchar el sonido de alguna guitarra y porque no también las voces de algunas personas que se animan a cantar a campo abierto. Muy linda experiencia.



Imposible perderse en la ruta pues el camino se encuentra señalizado y mucha gente va y viene por el camino. Unos van ansiosos y expectantes por llegar y otros regresan satisfechos y felices de haber llegado y conocido la Cascada de Lucle o quizás haber pasado una noche dentro de una carpa al borde del rio Chillón. 



En otra visita fui a las Cascadas de Huamanmayo, las cuales se encuentran dentro de fundo del mismo nombre en un predio rústico llamado Las Paterias. Para llegar a ellas hay que iniciar la caminata de un kilometro aproximadamente por el lado izquierdo del puente. Durante la caminata se aprecia lindos paisajes y algunos detalles, uno de ellos muestro en la foto siguiente: un tronco colocado encima de dos grandes piedras cruza de extremo a extremo sobre el rio a manera de puente. Por más adrenalina que tuviera no cruzaría el rio sobre ese tronco.



La caminata hasta el mirador dura aproximadamente una hora y debemos pagar S/. 2.50 por derechos de ingreso. En el mirador encontramos rústicas bancas de madera para descansar de la larga caminata y apreciar tranquilamente desde aquí la caída de agua.



Se puede apreciar la cascada desde el mirador, pero lo más bonito es acercarse a la base misma de cascada y de ser posible darse un chapuzón para refrescarse del fuerte calor que hay en el lugar. Desde el mirador debemos caminar una distancia aproximada de 100 metros para llegar hasta la misma base de la catarata .


No hay un camino marcado a seguir hacia la base de la cascada. Por donde caminar lo decide cada uno en ese momento, conociendo sus posibilidades y midiendo los peligros. No hay camino señalado, pero si hay muchas piedras de diferentes tamaños y las piedras más cercanas a la cascada están mojadas, por lo tanto, debemos tener mucho cuidado al acercarnos, una caída y podríamos sufrir fuertes golpes y lesiones malogrando nuestro día de paseo y aventura.



La caída de agua tiene una altura aproximada de 10 metros y también es conocida con el nombre de “El Velo de la Novia”. Sabemos que este nombre de las caídas de agua es muy popular en muchas partes de Perú y cada una dice ser la verdadera.




Para evitar la caminata algunas personas van montados en caballos, los mismos que se ofrecen en el puente. El alquiler del caballo tiene un costo de 10 a 15 soles dependiendo del día y flujo de turistas y también dependiendo de la cara del cliente. En caballo la ruta se cubre en 25 minutos aproximadamente. El caballo llega hasta el mirador y de allí si se quiere llegar hasta la misma base de la cascada hay que hacerlo caminando.




Si se cuenta con movilidad se puede hacer la ruta en movilidad hasta muy cerca de la cascada. Pero si decides hacerlo caminando lo más probable es que también tengas que regresar caminando. En la cascada no encontrarás movilidad o caballos para regresar. Vale la pena ir caminando, para disfrutar de los paisajes de la bella naturaleza.



También se puede alquilar cuatrimotos para hacer paseos por las cercanías del puente. Este tipo de vehículos son todo terreno, ideales para cualquier tipo de caminos y estaciones del año. Siempre debemos manejar con prudencia y equipados con los accesorios de seguridad.



Para ir al anexo de San Miguel debemos caminar por el lado izquierdo después de cruzar el puente hasta encontrar el sendero que las autoridades han construido para llegar hasta la parte alta. La distancia aproximada desde el puente de Obrajillo hasta la plaza de San Miguel es de aproximadamente 3 km.



El sendero es todo de piedra y cemento, con algunas escalinatas y tramos rectos cortos que a medida que avanzamos nos permite ir ascendiendo hasta la cima de la loma.



En varios tramos encontramos espacios diseñados como miradores los cuales nos permiten apreciar en toda su magnitud la belleza del paisaje Canteño. Un valle estrecho cruzado por el rio Chillón con pequeñas parcelas de cultivo alrededor.



Después de caminar media hora aproximadamente se llega al final del sendero empedrado en donde un muro de piedra da la bienvenida a todos los visitantes. Esta parte es conocido como el mirador “Las Lomas” y muy cerca de aquí se localiza la plaza principal del anexo de San Miguel.



La plaza principal es pequeña pero llena de pequeños arbustos y flores de lindos colores. También han colocado varias bancas de madera para descansar, apreciar su iglesia cómodamente o inicar una tertulia. En la parte central tiene una pequeña pileta que al parecer no funciona por lo seco que estaba la fuente.


Destaca en el  perímetro la plaza la Iglesia de San Miguel. Una construcción sobria sin muchos detalles pero con un buen mantenimiento y bien pintadita. Al lado derecho tiene una torre que sirve de campanario. Demás esta decir que allí se venera a San Miguel Arcángel.



Al costado de la Iglesia se localiza la pequeña plaza de toros. Cuando llegue se me acercaron algunos niños y me contaron que había dos tipos de corridas:  Una de sangre y otra de mofa. Lo que más se practica aquí son las corridas de mofa, que consiste en que algún payaso o poblador atrevido quizás bajo los efectos de algún trago entran al ruedo a torear un becerrito. Se trata de hacer bromas y ocurrencias para alegría y risas de los espectadores. También me dijeron que cuando hacen corrida con toros, ellos no matan al toro, sino que solo se hacen algunos pases de corrida para mantener viva la tradición del pueblo.



Luego un paseo por la principales calles cercanas a la plaza. La mayoría de las casas son de un solo piso, construidos con adobes y techos de calaminas a dos aguas





Finalmente la foto del recuerdo con mi hermano Carlos y primo Leo, compañeros de tantos viajes. Este viaje a San Miguel lo hicimos en octubre del 2,014.



 
El sendero es una subida de regular exigencia, pero si no se está preparado físicamente o no se está acostumbrado a las caminatas de subida, este viaje puede ser agotador y en lugar de tener un lindo recuerdo será todo lo contrario.  Por eso para comodidad de los turistas también existe la posibilidad de ascender montado en caballo los mismos que se alquilan en el puente. No hay excusa para llegar la Mirador de San Miguel y tener la vista espectacular del valle de Canta.



También desde la plaza de San Miguel se puede ir a la catarata de Shupucro que se encuentra en la parte alta de San Miguel a una hora más o menos de caminata de subida de regular exigencia.



Recomiendo hacer la ruta caminando de Canta a Obrajillo, es una caminata de 40 minutos aproximadamente por el borde la carretera. Una experiencia maravillosa para el recuerdo.

Muchas veces he viajado a Obrajillo y este relato tiene un poco de algunos de ellos, el paseo a la Cascadas de Huamanmayo es Agosto del 2,004. El viaje a San Miguel es de Octubre del 2,014 y el relato sobre Obrajillo es básicamente de uno que realicé en agosto del 2,019.  No esta demás señalar que a la fecha pueden haber cambiado algunos datos.