Desde Yanahuanca, capital de la
provincia de Daniel Alcides Carrión en la región Pasco se puede ir a muchos
lugares y desde allí hacer caminatas para conocer los restos de la cultura Yarush
que se encuentran diseminadas en las cimas de los cerros cercanos a varios
pueblos de aquí.
Después de los paseos y caminatas
que mejor que un baño reparador y mucho mejor si es con agua caliente teniendo
en cuenta las bajas temperaturas y el frio extremo que se siente en la zona de
Cerro de Pasco. Pero lo más agradable es que este baño lo podemos hacer con
agua natural temperada, es decir con aguas termales que brotan de la
naturaleza. Eso es posible en Yanahuanca porque a solo 10 minutos de viaje en
carro se encuentran los baños termales de Tambochaca y Villo.
En esta oportunidad escribiré
sobre mi experiencia de viaje hacia estos dos lugares que los pobladores de Yanahuanca
visitan constantemente para relajarse y aprovechar las propiedades curativas de
sus aguas.
En una de las esquinas de la
plaza principal de Yanahuanca se encuentran los autos colectivos con destino a
los baños. Una vez que se completó el número
de pasajeros partimos rumbo a los baños de Tambochaca y Villo. Este camino es el mismo que conduce hasta
Oyón.
La carretera a la fecha no está
pavimentada y el carro levanta polvo a su paso por los caseríos que se encuentran
al borde del camino.
Tambochaca es un centro poblado que
se encuentra sobre los 3,200 msnm y a una
distancia de 5 kilómetros de la ciudad de Yanahuanca.
Después de 15 minutos de viaje
llegamos a la entrada de los baños termomedicinales de Tambochaca.
El anuncio pintado en la pared
señala que son aguas curativas buenas para el reumatismo, calambres, artritis,
bronquios, asma y artrosis.
Las propiedades curativas de
estas aguas termales son conocidas desde la época de los Incas.
En el interior se encuentran 10
pozas privadas y una piscina grande de aproximadamente 12 x 25 metros. El agua
tiene un color verdoso y tiene compuestos químicos de sodio, calcio, potasio,
fósforo y hierro entre otros minerales.
Las aguas termales emergen del
subsuelo y son almacenadas en una piscina de concreto. Las temperaturas con las
que emerge el agua es muy caliente y llegan hasta los 80 °C.
Desde esta piscina de almacenaje
se deriva el agua a las pozas familiares y a la piscina general previa
graduación de la temperatura para que pueda ser usada por todos los visitantes.
El lugar
cuenta con vestidores para la comodidad de los visitantes. También con duchas
de agua fría y servicios higiénicos.
El límite de los baños está cercado
con una construcción de concreto y fierro muy cerca de la carretera. El diseño
permite ver desde el exterior las instalaciones de los baños.
Saliendo de los baños de
Tambochaca a una distancia de 50 metros se encuentra un puente sobre el rio
Chaupihuaranga que nos permite cruzar al otro lado donde se encuentran los
baños de Villo.
El puente en la parte central
tiene un peculiar detalle que llama mi atención. La parte central se apoya
sobre una inmensa roca. Posiblemente de presentarse un caso así en la ciudad
los ingenieros hubiesen retirado la roca y en su lugar habrían construido un
pilar de concreto que soporte el peso del puente, aquí los ingenieros aprovecharon
la naturaleza misma y ahorraron dinero.
Avanzo para cruzar el puente
hacia el otro lado, pero muy cerca del inicio del puente mismo se encontraba
una vaca grande que andaba libre sin ningún amarre. No se mucho sobre el
comportamiento de estos animales peor me miraba fijamente por lo cual desisto en ese momento de seguir avanzando.
Después de esperar unos minutos, el
animal se aleja y comienzo a cruzar el puente hacia el otro lado. Por el costado del lado derecho de la entrada a
los baños de Tambochaca discurre el agua caliente excedente de los baños para
terminar unida con las aguas del rio.
Finalmente cruzo al otro lado y
llego hasta un letreo que me recuerda que ya llegué a las aguas medicinales de
Villo.
Las instalaciones de los baños de
Villo son más pequeñas con relación a los baños de Tambochaca. Podemos apreciar
que la entrada a los baños de Villo es más simple, pero eso no significa que no
tenga las comodidades de Tambochaca. Durante mi visita pude apreciar que en ambos
baños había gente disfrutando de la piscina grande y muchos otros esperando la
oportunidad de acceder a los baños personales y familiares.
En el interior después de pasar
la boletería se encuentra un salón donde los visitantes esperan su turno para
poder acceder a los baños. El ambiente es dominado por una luz naranja producto
del policarbonato color anaranjado que cubre el techo y que con la luz solar
que penetra a través de ella genera ese efecto de luz naranja en todo el
interior.
En sus paredes algunos afiches
pegados nos recuerdan los principales atractivos turísticos de la provincia de
Daniel Alcides Carrión con su capital Yanahuanca, que dicho de paso son muchos
y variados.
En la parte principal se
encuentra una piscina grande similar a la piscina de Tambochaca. Es de uso
general, pero también hay pozas personales y familiares.
Los baños de Villo se encuentran abierto al público en general todos los días de 6.00
am a 7.00 pm y para ingresar en ellas
hay que pagar S/.2.50. Los horarios y costos son similares en los dos lugares.
Algo que tiene Villo y no tiene
Tambochaca es que después o antes darse un baño se puede pasear por los
alrededores o descansar al aire libre bajo una sombrilla hecha de troncos y
hojas secas.
No dejar pasar la oportunidad de
sentarse a orillas del rio y disfrutar escuchando el suave arrullo de sus
aguas. Seguramente que si uno se recuesta sobre la hierba lo más seguro es que
se queda dormido. También podemos apreciar que los pobladores han construido
sus viviendas en las laderas de los cerros muy cerca del cauce del rio.
Para acceder a este lugar de esparcimiento
debemos pagar S/. 0.50 que es básicamente para mantener el lugar limpio. Caminando
por el lugar veo una gran poza de agua, la cual forma parte de la belleza del
entorno y no es para ser usada por los visitantes. Las pozas y piscina de los
baños para ser usadas por los visitantes son otros.
Si se viene en carro propio y
directamente a los baños de Villo, no hay necesidad de ir a Tambochaca. El camino antes de llegar a Tambochaca se
bifurca en dos, viniendo de Yanahuanca si tomamos el camino de la izquierda llegaremos
a la entrada principal de todo este lugar de esparcimiento que estoy relatando el
cual forma parte los baños de Villo.
Los autos colectivos que vienen
de Yanahuanca generalmente dejan a los pasajeros en la entrada de los baños de
Tambochaca o en la entrada del puente que nos conduce a los baños de
Villo. Después de conocer Villo tenía
que cruzar nuevamente al otro lado para esperar los autos de regreso a
Yanahuanca.
Otra vez la misma vaca, cual guardián
del puente me impedía cruzar. No me quedaba otra cosa que esperar otra vez a que
el animal se retirara. Paciencia y buen humor
Este viaje lo realicé en noviembre del 2017, cualquier dato
podría haber cambiado a la fecha.
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