Si hay una laguna que conocen
muchos de los limeños yo creo que esa es la Huacachina. Llego a esta conclusión
por ciertas condiciones que se dan y que considero importante mencionar como
por ejemplo: su cercanía a Lima, su fácil acceso, las comodidades de sus
alrededores, su belleza, su altitud y su clima entre otros.
En el Perú existen muchas lagunas
más grandes y bellas, pero
lamentablemente en su mayoría se encuentran
en lugares muy alejados de los centros poblados, sitios casi
inaccesibles algunas de las cuales requieren de equipos y preparación previa
antes de intentar llegar a ellas.
Normalmente estas lagunas tienen su origen en los deshielos de nevados que se
encuentran a lo largo de toda la cordillera de los andes peruanos, en altitudes
que sobrepasan los 3,500 msnm.
Para llegar la Huacachina primero
hay que ir hasta Ica y para ello debemos abordar los ómnibus de las muchas
empresas interprovinciales que cubren la ruta Lima-Ica. Hay muchos
paraderos a lo largo de los principales
puentes y avenidas que se encuentran en la carretera Panamericana Sur.
La ruta de Lima a Ica se cubre en
aproximadamente unas 6 horas de viaje debido a que los ómnibus hacen paradas en
diferentes lugares del trayecto para recoger o dejar pasajeros. Este trayecto
cubre muchas centros poblados y ciudades importantes de regular densidad
poblacional como Cañete, Chincha, Pisco y la demanda de traslados de pasajeros
y encomiendas en bastante a cualquier hora del día. Los fines de semana el
panorama es de más congestión y no es fácil conseguir asientos en la ruta, en
este caso lo recomendable es comprar el pasaje en las agencias autorizadas.
Una vez en la ciudad de Ica se
debe abordar un taxi con destino a la laguna, la distancia es corta, el costo
del taxi puede variar de 8 a 10 soles y
el tiempo de viaje puede ser de 10 a 15 minutos aproximadamente. Los taxistas
dejan a los pasajeros a una cuadra de distancia desde donde se camina una
cuadra en medio de tiendas de souvenirs y recuerdos de todo tipo que los
visitantes al final del paseo compran para llevárselos de recuerdo.
Cuando se llega a la misma laguna
lo que llama más la atención a primera
vista es su ubicación en medio de grandes cerros de arena y rodeada de grandes
y pequeñas palmeras que le dan una vista espectacular. Es un típico oasis en
medio del desierto.
El origen del nombre de la laguna
proviene de la unión de dos vocablos: “Huaca” que significa “llorar” y “China” que significa
“mujer”. Uniendo ambos vocablos se puede decir que “Mujer que llora” es el
significado de esta laguna
Realmente la laguna es pequeña. Tiene un espejo de agua de aproximadamente 100
metros de largo por 60 metros de ancho. El color predominante de sus aguas es un
tono verdoso producto de las raíces y plantas que crecen cerca. En un comienzo
la laguna se formó por el afloramiento a la superficie de las corrientes de
agua subterráneas que corrían en medio del desierto, hoy en día su nivel
es controlado artificialmente.
Para pasear por la laguna no hay
mejor opción que caminar tranquilamente por los senderos construidos alrededor
de la laguna, los cuales nos permiten caminar muy cerca de la laguna a la
sombra de altas palmeras. Los fines de semana estos caminos están abarrotados
de gente, por eso recomiendo de preferencia visitar este lugar un día de
semana.
Desde aquí podremos apreciar en
todo su esplendor la laguna. La región de Ica se caracteriza porque casi todo
el año tiene sol y el lugar donde se localiza la laguna no es la excepción.
Mucha gente aprovecha sobre todo los fines de semana para darse un chapuzón en
sus aguas o pasearse en botecitos a pedales. En las noches las parejas llegan
al lugar para darse muestras de amor bajo la luz de la luna y promesas de amor
eterno, muchas veces dichas por las vivencias del momento pero que al final no
se cumplen. Pero estoy seguro que no todo es así, muchas otras promesas son cumplidas hasta la
eternidad, mucho más allá de este mundo.
La laguna también es un lugar
donde abunda la flora y fauna. Así como vemos abundante vegetación también en
la laguna podemos ver una fauna interesante como por ejemplo patillos, garzas y
otras aves.
La laguna se encuentra flanqueada
por dos malecones con grandes espacios para caminar.
En una parte de los malecones se encuentran muchos restaurantes donde se expende comida típica iqueña y también de otros lugares, es decir por la comida ni se preocupe, encontraremos comida para todos los gustos.
En una parte de los malecones se encuentran muchos restaurantes donde se expende comida típica iqueña y también de otros lugares, es decir por la comida ni se preocupe, encontraremos comida para todos los gustos.
En varios puntos de los malecones
encontraremos miradores y escaleras que nos permitirán acercarnos mucho más a la
laguna.
Uno de los personajes más
ilustres de Ica es el pintor Sérvulo
Gutiérrez Alarcón, nacido en esta ciudad en 1,914. Sus cuadros se basan
generalmente en el expresionismo, corriente artística del cual es uno de los
principales exponentes peruanos. En una de las alamedas que circundan la laguna
encontramos un busto que dice lo siguiente: “Homenaje de la Peña Pacheco Cabezudo al ilustre pintor
iqueño Sérvulo Gutiérrez 1914-1961 con motivo del cuarto centenario de la
fundación de la ciudad por iniciativa del diario La Voz de Ica. 1966.”
También encontramos otro busto en
homenaje a otro personaje iqueño, en este caso de trata de José de la Torre
Ugarte autor de la letra del Himno Nacional del Perú. Una placa dice: Homenaje
al ilustre iqueño José de la Torre Ugarte 1786-1831 autor de la letra del Himno
Nacional del Perú. Con la colaboración de la promoción 1939 del Colegio
Nacional San Luis Gonzaga y con el producto de la Exposición Anual Ciudad de
Ica organizada por el diario La Voz de Ica. Diciembre de 1964.
Dentro del perímetro de la laguna
se ha construido un lugar de descanso en donde se relata la historia de la
laguna y se recrea la leyenda con algunas figuras que ayudan a comprender el
relato.
Frente a la laguna, muy cerca de
sus orillas se encuentra el hotel Mossone, una construcción antigua con casi 100
años antigüedad, testigo del esplendor de aquel lugar. El nombre se debe a una
familia italiana que construyó el hotel a inicios del siglo XX, en el año
1,920. Ahora la construcción ha sido
declarado patrimonio nacional.
Y al frente otro moderno. El visitante puede escoger entre uno lleno de
tradición e historia que sobrevive al tiempo y otro que puede comenzar a hacer
historia.
Sobre la laguna se han escrito
algunas leyendas pero una de las más populares dice que en el lugar vivía una
linda doncella que se llamaba Huacca China. La doncella estaba muy enamorada de
un joven guerrero con el cual se casó. Como guerrero que era el joven se fue a
la guerra y no volvió más, había muerto en combate. La joven al enterarse de la
noticia lloró y lloró muchos días. Tanto lloró que sus lágrimas formaron una
pequeña laguna.
Un día mientras la doncella
descansaba observó que otro joven la estaba mirando, entonces corrió rápidamente
hacía la laguna. Mientras corría el
vestido que la cubría comenzó a caerse y se formaron las dunas de arena. El joven se quedó a esperar a la bella
doncella pero al ver que no salía se fue del lugar. Cuando la doncella quiso salir del agua se
dio cuenta que no tenía piernas, se había convertido en una hermosa sirena. Aún
hoy los lugareños dicen que en las noches de luna nueva la sirena sale para
llorar la muerte de su amado.
En un extremo se observa la
presencia de abundante totora que crece en el interior de la laguna. La totora
crece de manera silvestre en lagunas y zonas húmedas pantanosas, aunque en algunos casos también
son cultivadas, debido a que con ellas se pueden construir casas y
embarcaciones, utilizar su fibra para hacer trabajos artesanales como canastas,
sombreros y también servir de alimento
para el ganado.
Una buena opción es ir más allá
de la laguna y caminar por las grandes y extensas dunas de arena. Eso sí prepárate
para un esfuerzo adicional teniendo en cuenta que en cada paso el pie se hunde
en la arena y la arena al ceder en cada paso es como si también nos jalara
hacía atrás.
El viento forma en las dunas
lindas figuras las cuales alteramos con cada pisada, dejando también nosotros
nuestra propia huella sobre la arena. El viento soplará nuevamente y se encargará de que nuestra huella no perdure
mucho tiempo.
Desde aquí se puede apreciar toda
la laguna y como dice mucha gente es un oasis en el desierto. Al fondo se
encuentra el centro de la ciudad de Ica, se aprecia algo del camino por donde
los carros hacen su entrada desde el centro de Ica
Los atardeceres también son
espectaculares, el ocaso dura solo unos minutos, pero es un instante en donde
las palmeras cual cuento de hadas se convierten en árboles dorados que reflejan
su silueta en el manto de agua quieta de la laguna.
La laguna está próxima a grandes
cerros y dunas de arena que algunas tienen alturas de más de 100 metros con
pendientes entre 35 a 50 grados las
cuales son visitadas por los amantes del sandboard, un deporte de aventura que
consiste en el descenso de dunas o cerros de arena, sobre tablas especiales.
Uno de los principales atractivos de este deporte es que se practica al aire
libre utilizando los recursos de la naturaleza
y disfrutando de los paisajes que ésta nos ofrece.
También se pueden ascender las dunas sobre unos
carros areneros, especialmente adaptados para esta aventura de vértigo y
velocidad. El único requisito es la disposición a vivir algo nuevo y no tener
miedo a sentir nuevas emociones.
Muchas veces he visitado la
laguna de la Huacachina y este ha sido un relato de los recuerdo de esos
viajes. Alguna cosas pueden cambiar pero lo básico será lo mismo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario